
El calvados se produce utilizando diferentes variedades de manzanas, las cuales han sido cultivadas y seleccionadas de forma muy cuidadosa. Las frutas se trituran y exprimen para obtener su mosto, el cual es sometido a fermentación cerca de 6 semanas, con lo que se consigue su sidra, con una graduación de alcohol de entre 5 y 6 grados.
Posteriormente, se lleva a cabo su proceso de destilación continuo, con la finalidad de conseguir la concentración de aroma a manzana ideal, utilizando alambiques de cobre. El destilado es madurado en barricas de roble francés por un periodo mínimo de 2 años.
- Olor: aromas intensos a manzanas frescas.
- Sabor: franco, agradable y muy afrutado.