
57% Cariñena y 43% Cabernet Sauvignon.
Los viñedos forman un total de ocho hectáreas de un verde frondoso, de unas bellas cepas que despiertan con aires de vergel. Están densamente plantados con las variedades cariñena, garnachas tinta, balanca y gris, merlot, syrah, viognier y picapoll. La gestión de la masa vegetativa, la cubierta vegetal, el control ecológico y el mimo al viñedo les permite extraer el alma de cada una de las variedades de uva, al mismo tiempo que mejorar el equilibrio y la armonía natural del entorno.